Me encontraba en el centro de Bogotá, donde no veía a nadie, estaba buscando un cambio de un jean que había comprado, estaba bastante sorprendido al ver el centro prácticamente vacío, era sorprendente poder ver el suelo del centro, aunque ese suelo desgastado por la inmensa cantidad de historia que pesa en el, pero que asombrosamente no tenia huecos, algo que abunda en la capital.
Aunque el ambiente del centro me a parecido malo, casi nunca voy pero las veces que voy siento un mal ambiente, ese día sentía un ambiente siniestro, ver u lugar donde normalmente uno esta algo angustiado porque no le pase nada malo, ahora verlo vació se piensa más que en algún momento pasara algo.
Caminando me encontré con una gran marcha indígena, sentir el poder, la fuerza de un pueblo unido, nunca había sentido algo parecido, pero a la vez se sentía la tristeza y la rabia de una raza que a sido ultrajada e irrespetada, a pesar de sentir algo nuevo, tomé la decisión de alejarme del lugar, no me gusta ver a lo que se tiene que llegar para que un determinado grupo de personas exija respeto, que por derecho merece.
Escrito por: Germán Méndez
No hay comentarios:
Publicar un comentario